La Selección Colombia cerró su gira por Estados Unidos con un empate sin goles frente a Canadá en el Red Bull Arena de New Jersey. Tras la contundente victoria 4-0 ante México, el equipo dirigido por Néstor Lorenzo buscaba mantener su impulso, pero se encontró con un rival ordenado, físico y tácticamente exigente.
El duelo fue cerrado, con pocas emociones, y terminó dejando más análisis que celebraciones. “Le dije a los muchachos que era un rival de octavos o cuartos de final de un Mundial: un equipo muy rápido, muy físico, con estilo de juego europeo”, comentó Lorenzo tras el encuentro.
El entrenador también reconoció que la rotación masiva que aplicó en el once inicial afectó la fluidez colectiva del equipo: “Hubo muchos cambios planificados de antemano, y creo que eso quizás nos restó concentración en momentos puntuales. Lucho sabía que iba a salir, James que iba a entrar. El hecho de haberlo planificado no nos ayudó en cuanto a la concentración que se requiere en el campo”.

EL PARTIDO
La primera parte fue complicada para la 'Tricolor'. Canadá presionó alto y cortó los circuitos de salida, obligando a Colombia a jugar largo. Álvaro Montero respondió bien ante un remate de Tajon Buchanan, mientras la dupla de centrales —Jhon Lucumí y Dávinson Sánchez— sostuvo al equipo en el fondo. Con el paso de los minutos, Colombia logró equilibrar el trámite, aunque sin generar peligro real.
Ya en la segunda mitad, el equipo adelantó líneas y tuvo su opción más clara: Luis Díaz combinó con el “Cucho” Hernández y definió cruzado, pero el balón se fue apenas desviado. Luego, con los ingresos de James Rodríguez, Rafael Santos Borré, Yáser Asprilla, Kevin Castaño, Jéfferson Lerma y Kevin Serna, el ataque ganó movilidad, aunque sin eficacia. Ándrés Román y Borré desaprovecharon dos claras sobre el final.
En definitiva, el empate 0-0 no fue el resultado esperado, pero si una oportunidad muy útil para que Lorenzo probara variantes y ajustara detalles en el camino hacia el Mundial.
