El reino de las excusas: los árbitros no son los culpables

“Si no decimos nada, nosotros también vamos a ser cómplices de esto” ha disparado Juan Reynoso tras el empate de Melgar contra Alianza en Matute.
Foto: JAVIER SORIANO - AFP/TT

“El Ajedrecista” ha responsabilizado directamente al juez del partido, Pablo López, de la igualdad en la Victoria y, aunque no deja de ser cierto que su labor no fue buena, también lo es que el resultado se explica mejor por un error grave de su arquero Carlos Cáceda que por algún fallo arbitral. El penal que le sancionaron a Melgar ciertamente es controversial, pero no da para encender pirotecnia verbal de grueso calibre. El partido se le escurre a Melgar en la última del juego por un error propio y eso es algo que Juan debería asumir.

La misma línea de Juan, pero en menor medida la han tenido Néstor Gorosito y Miguel Rondelli este año con Alianza y Cusco Fc respectivamente y también Fabián Bustos la temporada pasada con la “U”. En el caso de los “Guerreros dorados” los arbitrajes no siempre han sido benévolos con ellos y algunos errores involuntarios si se han cometido contra los imperiales. Lo que, de otro lado, no justifica que su director técnico en ocasiones se desborde y cometa exabruptos.

En cuanto a Pipo y a Fabian da la sensación que la queja permanente suele condicionar a los jueces y es una medida de presión para influirlos en sus decisiones. Es la única manera de entender la desproporción de sus reclamos. Los árbitros respecto de la U y de Alianza se ha equivocado a favor y en contra con la misma frecuencia. En ese sentido, este 2025, Fossati ha sido mucho más equilibrado para referirse al trabajo de los referís.

¿Es acaso una utopía sonar con entrenadores que se ocupen más del juego de sus equipos que del trabajo de los árbitros el día del partido? Esperemos que no.