La expectativa de Paraguay rumbo al Mundial 2026 tomó forma este viernes después del sorteo realizado en el emblemático The Kennedy Center de Washington. Allí, el entrenador de la Albirroja, Gustavo Alfaro, analizó por primera vez el grupo que le tocó a su equipo, en un camino que tendrá como principal desafío un estreno frente a uno de los países anfitriones.
“Un grupo parejo, más allá de que todavía nos resta ponerle un nombre propio al que venga de un repechaje”, señaló Alfaro en la zona mixta, remarcando que, aunque aún falta definir al último integrante, la paridad será el sello dominante. La Albirroja quedó ubicada en el Grupo D junto a Estados Unidos, Australia y el ganador del repechaje europeo, instancia que disputan Turquía, Rumania, Eslovaquia y Kosovo.
El técnico argentino valoró especialmente el antecedente reciente ante los estadounidenses, aunque advirtió que no será un parámetro absoluto. “Ya tenemos un antecedente cercano de haber jugado contra Estados Unidos hace poquito, y si bien uno no puede recrear, porque ningún partido es igual a otro, obviamente en el arranque de una Copa del Mundo, jugar contra un organizador, contra todo lo que eso significa, es algo trascendente”, expresó. Para Alfaro, el peso de enfrentar al anfitrión en el debut será un factor clave en la preparación.
En esa línea, subrayó que los meses previos estarán marcados por una preparación meticulosa. “Tenemos mucho trabajo por delante para llegar de la mejor manera”, afirmó, destacando la importancia de ajustar cada detalle para un estreno que podría marcar el rumbo del torneo.
Paraguay hará su presentación oficial el 12 de junio, cuando buscará sorprender a un Estados Unidos que intentará hacerse fuerte con el apoyo de su público. En un grupo equilibrado, con rivales de distintas escuelas futbolísticas, la Albirroja afrontará un desafío que mezcla exigencia, expectativa y la oportunidad de reivindicarse en la escena mundial.
