Un triunfo de enorme valía que suma para diversos fines de Boca Juniors: afianzar su lugar en el la tabla anual pensando en la Copa Libertadores del año entrante, asegurar definitivamente la clasificación a los octavos de final del Torneo Clausura y, primordialmente, llenar la reserva de moral de cara al clásico contra River Plate de la próxima semana.
Este enfrentamiento, que en otro momento de la temporada el equipo "xeneize" tal vez no habría podido ganar, se saldó a su favor. Pero a comienzos de noviembre, con un rendimiento sobresaliente de Ander Herrera, la constante capacidad de romper el esquema del rival por parte de Exequiel "Changuito" Zeballos, y con la fortuna ahora del lado azul y oro, el conjunto de La Ribera regresa con animo a tope tras vencer a Estudiantes en La Plata para encarar la típica semana de previa del clásico.
La etapa inicial evidenció a un Boca procurando tomar el control del encuentro, con la batuta de Carlos Palacios en ciertos pasajes. El chileno manifestó una clara voluntad de intervención e influencia en la creación de juego, que se complementó con el desbalance permanente de Exequiel Zeballos, el verdadero foco de atención. El "Changuito" se las ingenió para generar un penal a su favor, aunque lo estrelló en el palo en un remate muy ajustado, dejando una clara señal: el espíritu ganador de Boca estaba muy por encima del de Estudiantes.
Ya en el complemento, Milton Giménez interceptó un rebote cerca del área y brindó una habilitación de lujo, dejando a Zeballos en inmejorable posición. El "Changuito" no perdonó, logrando la ventaja para los visitantes con un disparo de zurda potente y angulado. No obstante, la reacción del local fue inmediata, pasados diez minutos el explosivo Edwuin Cetre consiguió el empate mediante un tiro penal, logrando acorralar al conjunto de La Ribera.
El tramo final estuvo fuertemente condicionado por las resoluciones del juez Leandro Rey Hilfer. Primero, cuando la tecnología del VAR corrigió su decisión inicial y procedió a la expulsión del uruguayo Gabriel Neves. Y, posteriormente, al sancionar una pena máxima polémica de Fabricio Pérez sobre Ander Herrera, una jugada que la banca de Estudiantes protestó vehementemente alegando que la infracción se había producido fuera de la zona delimitada.
De esta manera, Miguel Merentiel se encargó de ejecutar el tiro penal para sellar el 2-1 definitivo en los instantes postreros, otorgándole a Boca un triunfo con un fuerte tinte de hazaña.
