La Selección Peruana de fútbol cayó 2 a 1 ante Chile en el amistoso por fecha FIFA disputado en el estadio “Bicentenario” de La Florida en Santiago. Más allá de que el resultado en contra no sea lo más importante, el partido deja una mezcla de sensaciones: Luces, sombras y reflexión de cara al futuro. Aquí, lo bueno, lo malo, lo que ilusiona y lo triste del primer encuentro dirigido por Manuel Barreto.
Lo bueno: Destacaron las actuaciones de Jesús Castillo y César Inga. Ambos lograron trasladar el buen momento que atraviesan en Universitario de Deportes al combinado nacional. Mostraron solvencia, personalidad y el segundo coronó todo ello con un golazo que adelantó a Perú antes del descanso. Se les sumó Erick Noriega, quien sin mostrar todo el potencial que tiene, cumplió en el medio y mostró la jerarquía que ha adquirido jugando en Brasil este corto tiempo.
Lo malo: No tuvo la misma fortuna Luis Ramos. El atacante del América de Cali todavía no consolidó una buena actuación con la selección y por ahora no se perfila como ese delantero que se necesita, con urgencia, de cara al futuro.
Lo que ilusiona: Los debuts de Maxloren Castro y Felipe Chávez. Por sus edades, los dos pueden ser opciones para ampliar el universo de jugadores en el mediano plazo. El primero, con una actuación más que aprobatoria y el segundo aún sin tener mayores luces tras su ingreso pero con el respaldo de haberse formado en Alemania y militar en el Bayern Múnich.
Lo triste: Perder en la última jugada el partido -aunque amistoso, no deja de ser un clásico- y por si fuera poco con un autogol de Matías Lazo, uno de los futbolistas jóvenes que hace algunos años, se configura como un proyecto interesante.
Hoy por la tarde la delegación volvió a Lima y los integrantes se reintegrarán a sus clubes de inmediato.
