En una ciudad que va a quedar grabada en su memoria y en la de todos sus hinchas, Flamengo levantó la Libertadores, cobrándose la revancha ante Palmeiras que lo había derrotado en dicha instancia en el 2021. Como en el 2019, Lima fue testigo de un título más del que según muchos es el más grande de Brasil. Aquí repasamos el camino que lo llevó a la gloriosa tarde de ayer.
Flamengo integró el grupo "C" de la Copa Libertadores junto a Deportivo Táchira (VEN), Central Córdoba (ARG) y LDU de Quito (ECU). El arranque fue bueno ya que de visita, derrotó a los venezolanos por 0 a 1. Sin embargo después, el cuadro rojinegro entró en un bache que no le permitió ganar los tres siguientes encuentros, perdiendo contra Central Córdoba de local y empatando con este equipo y con LDU de visita. Era entonces cuando el equipo de Filipe Luis debía demostrar su grandeza en momentos de presión y así lo hizo. Le quedaban dos partidos de local y ganó ambos. Dos a cero a los ecuatorianos y 1 a 0 al Táchira de Venezuela.
Dicen que en octavos comienza la verdadera historia de este tipo de torneos. A Flamengo le toca jugar esta instancia contra un conocido suyo: El Internacional de su país, a quien dejó fuera a través de un claro 3 a 0 en el global ganándole los dos partidos. Luego, le tocó Estudiantes de La Plata, quizás el escollo más complejo de toda la Copa para el campeón ya que la serie terminó empatada y fueron los penales los que decidieron su pase a semifinales.
Ya en dicha instancia se medirían con otro argentino, el sorpredente Racing de Gustavo Costas. Lo vencieron con lo justo en Brasil y en Avellaneda casi pidiendo la hora, eliminaron a otro equipo argentino para llegar a la cita en la capital peruana el último Sábado.
El "Mengão" consiguió su cuarta estrella, la tercera en siete años, habiendo disputado cuatro definiciones desde el 2019 hasta la actualidad, lo cual lo confirma como el mejor del continente en esta edición y un club dominante de la última década.
