La Selección Argentina brindó una exhibición de fútbol este martes al vencer 6-0 a Puerto Rico en el Chase Stadium, en un amistoso internacional que dejó a los hinchas con la sonrisa intacta. El conjunto dirigido por Lionel Scaloni fue una máquina desde el arranque, combinando posesión, movilidad y pegada para firmar una goleada sin objeciones.
El primer aviso, sin embargo, llegó desde el rival. A los 8 minutos, Leandro Antonetti interceptó un pase de Messi y remató desde su propio campo, obligando a Emiliano “Dibu” Martínez a reaccionar con reflejos felinos para evitar un gol insólito.
Pero la Albiceleste respondió enseguida. A los 14 minutos, tras un remate de Messi que dio en el travesaño, Nico González conectó de volea y Alexis Mac Allister corrigió con un toque sutil para abrir el marcador.
El 2-0 llegó a los 24 minutos con una jugada de manual: Messi filtró un pase perfecto y Gonzalo Montiel apareció por sorpresa para definir de volea, en una acción que reflejó la fluidez y precisión del equipo campeón del mundo.
Argentina no bajó el ritmo y volvió a golpear antes del descanso. A los 37, otra combinación entre Messi y Nico González terminó en asistencia para Mac Allister, quien firmó su doblete con una definición al primer toque.
El Dibu Martínez también tuvo su momento estelar: a los 40 minutos, Wilfredo Rivera dispuso de una doble oportunidad clara, pero el arquero argentino respondió con dos tapadas espectaculares para mantener el arco en cero.
En la segunda parte, el dominio argentino continuó. Messi rozó el cuarto tanto a los 56 minutos, aunque su remate fue bloqueado justo a tiempo. La suerte, en cambio, sí acompañó al equipo a los 65’: un centro al área fue mal despejado y Steven Echevarría terminó marcando en contra.
Ya en el tramo final, Lautaro Martínez selló la goleada con dos definiciones de clase. Primero, a los 79 minutos, tras una asistencia precisa de Messi, y luego en tiempo de descuento (90+4), cerrando el 6-0 con el que Argentina mostró su poderío ofensivo y su jerarquía internacional.
Con esta victoria, la Scaloneta reafirma su solidez rumbo a los próximos desafíos y demuestra que, más allá del resultado, su estilo sigue intacto: presión alta, creatividad y gol en todos los sectores del campo.
