Otra final, otro título: Estudiantes cerró el 2025 con una nueva vuelta olímpica

En San Nicolás, el Pincha le ganó a Platense en un partido áspero, y se quedó con el Trofeo de Campeones
Alario fue el héroe de Estudiantes Foto: FOTOBAIRES
Alario fue el héroe de Estudiantes Foto: FOTOBAIRES

Estudiantes de La Plata le puso moño al 2025 y lo cerró con una consagración que vale doble: levantó el Trofeo de Campeones después de imponerse a Platense en San Nicolás, en una final de esas que se juegan con los dientes apretados. No fue una noche para el lirismo: fue tensión, detalles y un desenlace que dejó claro quién llegó más preparado para bancarse el peso de un partido largo mental.

En ese contexto, el Pincha volvió a hacer lo que viene repitiendo cuando la cosa quema: no se desordena, no se apura y elige bien cuándo acelerar. El Calamar lo incomodó, le discutió el trámite y lo obligó a tomar decisiones bajo presión con resultado adverso, pero Estudiantes mostró oficio. Y eso, en finales cerradas, es su diferencial porque entiende mejor los momentos y el que tiene la frialdad para pegar cuando el rival parpadea.

Y si alguien busca una explicación más amplia del porqué, hay que mirar la vitrina que el “barba” Domínguez fue llenando en el club. Su ciclo no se sostiene sólo en oratoria: se apoya en títulos y en la repetición del golpe en momentos clave. Primero llegó la Copa Argentina 2023, que fue algo así como volver a prender la chispa ganadora. Después, en 2024, avanzó dos casilleros como la Copa de la Liga y el Trofeo de Campeones, confirmando que no era una racha suelta sino un equipo con método. Y en 2025 terminó de redondear un año bravo con el Torneo Clausura y este nuevo Trofeo de Campeones. Todo esto sumado al choque de Copa Libertadores frente a Flamengo, donde se lo vio muy incómodo al conjunto carioca. En resumen: una seguidilla que lo instala como un DT de época para el Pincha.